Soy fan del fútbol americano hace poco más de 15 años, así que ayer que se jugaba el Super Tazón, se suponía, iba a ser un gran día para nosotros los seguidores de este deporte. Todos los aficionados hicimos planes para el gran juego, pero ya saben el dicho… “Si quieres hacer reír a Dios, cuéntale tus planes” ¡¡Y vaya que se rió!!
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El partido fue una decepción desde el punto de vista deportivo. Aunque no conozcan o no gusten el deporte, es por pura lógica; si un equipo es totalmente superior al otro, pierde interés y emoción el encuentro. Pues eso sucedió, un juego como para irse a enfriar las cervezas a soplidos.
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El partido fue una decepción desde el punto de vista deportivo. Aunque no conozcan o no gusten el deporte, es por pura lógica; si un equipo es totalmente superior al otro, pierde interés y emoción el encuentro. Pues eso sucedió, un juego como para irse a enfriar las cervezas a soplidos.
Luego al medio tiempo, un evento de gran importancia históricamente para quien se presenta ahí, y a un genio se le ocurre poner en el escenario al flamante ganador del Grammy: Bruno Mars… ¿¿¿QUE??? ¿Quién cuernos es Bruno Mars y porque le dan este lugar a un tipo que se peina con soplete?
Aburridísimo el hombre, más perdido en el escenario que un perro en medio del periférico. Al menos desperté porque escuche a los Red Hot Chili Peppers, sino, un bostezo total habría sido el medio tiempo.
Pero bueno, no todo se arruino por las miserias deportivas de un equipo o por las miserias musicales actuales. Afortunadamente, la botana que planee para degustar durante el juego, fue lo mejor de todo.
¿Gustan?
