11 de febrero de 2012

...Y siempre lo serás



Quien tropezó conmigo en ese momento justo de un tiempo equivocado, ahí, donde lo único que se buscaba era volver a percibir que el absoluto no había perdido su fundamento, y que aun se podía distinguir el cielo del suelo.

Y así, aun sin tener concepción de que cruzar nuestros caminos no fue un tropezón circunstancial, sino un regalo que nos elevo a ese anhelado cielo que volvimos a saborear, entre sueños de adultos y sonrisas de niños, delineando nubes donde tus ojos cerrados me brindaban la serenidad perdida y ahora perfecta, para darme cuenta que estaba viendo dormir a la mujer que parecía haber sido moldeada por mis propios sueños.

Hoy sigues siendo la sorpresa del mejor encantamiento, pero evolucionada a la firmeza de una realidad, y ambas se han amalgamado otorgándome la seguridad de que tu eres para mi, y que el futuro contigo, será uno que no vera mis brazos bajar, no por ti.

Porque tu eres mi pasión y mi ternura, revestida en la mujer mas salvajemente deliciosa, porque tu eres mi compañera y mi amor... Y siempre lo serás, mi Lorenita.